TRAVESIA ORDESA 2010 - ETAPA2 POR JAVIER CORERA

Refugio de Tucarroya 2661 mts - Gavarnie 1380mts.
Distancia: 10km
Desnivel: 200mts positivos – 1509mts negativos

Amanece el segundo día con nubes y claros a 2700 metros en el Refugio de Tucarroya después de una noche tormentosa. El Perdido, su glaciar y el lago de Marboré nos decían “buenos días” mientras desayunábamos, hacíamos las mochilas y nos disponíamos a bajar de allá arriba. No sin antes dejar el refugio como nos gustaría encontrarlo. La verdad que daba pena dejarlo, era un lugar especial, de los que te acuerdas, pero nuestro camino debía seguir.
La segunda etapa se puede dividir en tres claras partes: la primera, bajar una comprometida pala, la segunda ir ladeando y subir un pequeño colladito y la tercera bajar hacia el pueblo de Gavarnie.
En la primera parte, en cuanto empezamos a bajar, la caída de la mochila de Albeniz 200 metros para abajo en un despiste amenizó una bajada complicada y técnica, ya que al principio había hielo, de verano, pero hielo siempre peligroso y había una caída considerable. Eso y que íbamos a pelo también, bueno los bastones haciendo de piolet y mucha precaución. En poco rato abajo, ladear un poco ligeramente y parada a coger agua ya que en Tucarroya no había, tan sólo cogímos un poco de la tormenta al caer por la pared. Subir al collado truku truku disfrutando de las vistas que tienen en el lado francés. Paradica arriba a beber y comer algo, donde nos esperaban los colegas catalanes, unas fotos y para abajo. Conforme descendemos alguna marmota se deja agobiar por Albeniz, siempre tan amigo de los animales. Parecía que las marmotas nos seguían en todo el camino. A todo esto, la comida de una cuadrilla de gabachos es bendecida por nosotros mientras piensan si pillarían nuestros años…Y ahí el Refugio de Spuguettes, entre aquellos maravillosos valles. Parada a comer algo tranquilos al solete y a Gavarnie de tirón en suave bajada mientras Gur ya estaba pensando en que el brick de tomate se iba a quedar en alguna basura de Gavarnie (nos debes unas magras en el piso). El camino discurre en una senda clara acompañado de vacas y caballos. Llegada a Gavarnie a lo grande, petao de gabachos, con la sonrisas en nuestras bocas, señal de que todo, hasta el momento, iba bien. Cervezota de la victoria en el camping con la Gran Cascada a nuestro alcance de vista, ducha y vuelta por el pueblo de turismo, menudas pintas! Volvemos al camping a cenar gallina blanca, colacadico, batur y a la madriguera, pues la tercera etapa nos mosqueaba un poco a todos, bueno, un poco más a Gurbindo.
Fue una jornada en la que se vieron varios gestos de compañerismo entre la expedición, propios de varias aventuras juntos, más que nada porque nadie quería dejarle papel a Albeniz para ir a giñar, porque Gurbindo se moría de sed y del agua de Core sabía que no iba a beber, porque Alain con eso de que repartía la comida, se quedaba la mejor parte y porque Javiertxo sólo pensaba en que para el segundo día se le estaba acabando su cabezón de pan. Destacar también que Albeniz me dejó 5 o 7 minutos de su agua caliente en la ducha del camping, que costaba 2 euros. Ah! Que cómo estaba la del camping, madre!!! I love you.

Me gustaría destacar que hacer una travesía es más que ir al monte, es una aventura en la que varios factores entran en juego, en si acompañará el tiempo, en si aguantará el cuerpo, en si nos durará la comida, en si encontraremos buen sitio para dormir, en si no ocurrirá alguna desgracia…Destacar la labor de Dinami, jefe de expediciones, siempre ayudando al grupo en todo; la labor de Gurbindo, capaz de establecer una conversación amena del tema que sea; la labor de Javiertxo, con su sonrisa en la boca permanente, señal del disfrute de la experiencia y la labor de Albeniz, la de hacer que cualquier momento del día sea el mejor momento del día. La verdad que yo, de las tres que hemos hecho en plan cuadrilla ésta ha sido la que más he disfrutado. Me ha transmitido muchas sensaciones, quizá por ir 5 personas, quizá por ser uno de los sitios más bonitos del Pirineo, quizá por los pasos técnicos que ha habido que superar, quizá por las cimas que hemos conquistado, no lo sé. Y nunca lo sabré, pero me queda en el recuerdo para siempre haber disfrutado de mis 5 días de vacaciones con mis amigos en la naturaleza. Ha sido todo un placer.

CARA NORTE DE MONTE PERDIDO Y GLACIAR

BAJADA DE TUCARROYA

DESCANSO EN COLLADO

QUE PIENSAS?

BRECHA DE ROLANDO

PROXIMO OBJETIVO

TURISTAS...